Acá se ve la importancia de que los que atacan bajen a participar en la elaboración de la jugada como recurso ofensivo, aunque a primera vista pareciera la contrario. Verlo a Ribery en posición de 3 para iniciar la jugada, correr 100 metros sin marca y luego dar el pase de gol es una muestra de que atacar de manera inteligente abarca todo el campo de juego y no que los habilidosos deban esperar a superar la mitad del campo para ser influyentes en ataque.
Acá se ve la importancia de que los que atacan bajen a participar en la elaboración de la jugada como recurso ofensivo, aunque a primera vista pareciera la contrario. Verlo a Ribery en posición de 3 para iniciar la jugada, correr 100 metros sin marca y luego dar el pase de gol es una muestra de que atacar de manera inteligente abarca todo el campo de juego y no que los habilidosos deban esperar a superar la mitad del campo para ser influyentes en ataque.